En estos días, más que nunca, es preciso mantener la calma, una calma profunda y de verdad, no un tenso hacer como que no pasa nada. Existen numerosas técnicas sencillas para lograrlo, activando nuestro sistema nervioso parasimpático, el que propicia el sosiego y el bien- estar en nosotros.
Una de las más eficaces es lograr mantenerse en el AQUÍ y AHORA, con una actitud de GRATITUD. La gratitud es una de las emociones que nos coloca en más alta vibración y vibrar alto es algo que precisamos para transitar este momento del que somos protagonistas, cada cual desde su lugar y la experiencia que le esté tocando vivenciar.
Te propongo un tip sencillo que puede ayudarte a estar presente, en tu centro que es donde mejor podemos estar y desde dond , sin aparentemente hacer nada, más podemos hacer:
Cierra los ojos, respira profundamente, haz en tu boca un gran buche de saliva, siénte como lo tragas y como el aire que estás respirando te llena de vida. Ahora accede a un recuerdo que en tu vida te evocó mucha gratitud. Sientela y regocíjate con ese recuerdo. Disfruta de lo que estás sintiendo ahora. Observa como cambia tu estado y sientes ese bienestar de estar presente. Ese presente que es siempre un magnífico regalo. Un regalo que , sin duda alguna nos merecemos.
Sintoniza con la vibración de tu verdadera esencia. Está vibrando alto y esa sensación te pertenece, la reconoces, te atañe, va más allá de ti, hasta los que te rodean y amas, y finalmente se une con la vibración de un mundo que la está precisando y te la agradece.
En este momento que estamos atravesando alguien ha de ocuparse de pensar y sentir bonito. Ya no es solo por ti, ahora es también por el mundo.
Namaste
Teresa Delgado Duque
Teresa Delgado Duque Desde el Corazon
